Freddy Montes es sobrino del legendario Bebo Valdés y primo del no menos icónico Chucho Valdés |
Por Leonardo Venta
El Centro
Comunitario del Área de la Universidad (CDC, por sus siglas en inglés), ubicado
en el 14013 N 22nd Street, Tampa, Florida 33613, anuncia una espectacular fiesta
de máscaras el sábado, 3 de noviembre, en
celebración de su 20.º Aniversario, presentada
por Florida Hospital Tampa, en un evento en el que no faltarán detalles tan seductores
como una galería con demostraciones de arte en vivo, subasta silenciosa,
cena y baile, barra de martini, postres, así como la oportunidad de fumarse un
puro bajo las estrellas, arrobados por la excelente música
de destacados artistas en vivo.
El eminente percusionista,
compositor, arreglista y cantante cubano Freddy Montes –sobrino del legendario
Bebo Valdés y primo del no menos icónico Chucho Valdés– recibirá el
reconocimiento "Legado de campeones" en el evento, junto a otras
personalidades de nuestra comunidad, por su gran aporte a CDC. A raíz de este
homenaje, entablamos una conversación con Montes que ha cobrado felizmente forma de
entrevista.
Eres muy popular entre
nosotros, pero para quienes son nuevos en nuestra comunidad, ¿cómo le gustaría
a Freddy Montes ser presentado?
Me gustaría que me presentaran como una persona sencilla que ama lo que
hace, mi carrera o profesión: la música.
¿En qué parte de Cuba
naciste y dónde resides actualmente?
Nací en el municipio habanero de Marianao, pero me inscribieron en Quivicán.
En La Habana también nació mi madre y es de donde proviene esta familia Valdés
. Actualmente resido en Tampa.
Vienes de una familia de grandes
músicos, ¿pudieras sintetizarnos su relación contigo e influencia en tu carrera?
Tenemos una relación familiar sumamente
compenetrada, pues a petición de mis abuelos maternos se adquirió una casa bien grande para tratar de mantener a todos los hijos y nietos juntos, o la
mayor parte de miembros posibles. Fue una casa muy alegre y con mucho amor,
donde ya alrededor de las siete de la mañana se escuchaban estudios de música clásica
y afuera la radio con guarachas, sones, boleros, danzones y
toda una gama de ritmos de esa época.
¿Cómo descubres y evoluciona
tu vocación artística?
Tuve facilidad desde muy pequeño para retener tanto la melodía como la orquestación
de piezas clásicas o populares. Bebo [Valdés] lo comenta en la casa y es mi
primer maestro de música y me califica como "show man", porque me
gustaba mucho bailar. Después, la maestra Chiquitica Herrera me da un impulso
muy alto con clases de solfeo y teoría, con el contrabajo como instrumento.
Estos fueron mis inicios.
¿Te acompañas siempre de la
guitarra o utilizas otros instrumentos?
La guitarra es el instrumento que preferiblemente más ejecuto, pero toco otros instrumentos casualmente para acompañarme.
¿Puedes hablarnos de tu
repertorio?
Es muy diverso. Abarca numerosos géneros y estilos, tanto música
para escuchar como bailable. Trabajo música pop, funk, blues, jazz, latin jazz,
samba, bossa nova, merengue, plena, cumbia y ritmos cubanos y caribeños.
¿Qué significa para ti este reconocimiento en la celebración del 20.º Aniversario de CDC?
Lo recibo con regocijo y mucha alegría, por su esencia de contribución a
una causa de apoyo al servicio social. Estoy satisfecho de haber sido elegido
en mi campo –el musical–, el cual ayuda, construye, mejora, crea y desarrolla
el futuro de nuestros jóvenes en su educación. De mi parte, han sido veinte años
de enseñanza.
Tengo entendido que diriges un
grupo llamado “Freddy Montes y su Son”. ¿Todavía sigues integrado a esta agrupación?
Mi agrupación musical está activa y hay mucho todavía por hacer.
Sé que enseñas música, ¿cómo
te iniciaste en esa práctica?
En Tampa, comencé a impartir clases de guitarra y tambores en Paragon Music
Center, con solfeo y teoría. Después, fui incursionando en otros proyectos y,
dentro de esos, continúo con este programa donde me encuentro en la actualidad.
Siento la satisfacción de haber tenido unos cuantos alumnos de guitarra que son
reconocidos internacionalmente. Algunos
son estudiantes que tuve en Cuba.
Como compositor, ¿crees en
la inspiración y cómo la experimentas?
Sí, la inspiración y la motivación tienen que convoyarse, ya sea bien para
componer una canción o para crear cualquier obra musical. Tienes que darle
riendas sueltas a tu sensibilidad y experimentarás diversidad de sentimientos
con la finalidad de elaborar puros pensamientos.
¿Cuáles son los estilos
musicales y compositores que prefieres y
por qué?
Soy muy diverso en mis gustos. Me encanta la música clásica tanto como la
popular, digamos: Mozart, Bach, Chopin, Beethoven, Schubert, Albéniz, Rajmáninov
y muchos más. Por otra parte, me gusta la música de Ernesto Lecuona, Osvaldo
Farrés, Bebo Valdés, María Grever, José Antonio Méndez, Rafael Hernández, Bobby
Capó, Agustín Lara, Armando Manzanero, John Lennon, Paul McCartney y otros. El
escuchar esa música me dio para hacer todo lo que hago.
Trabajamos juntos en la obra
musical "Antología de Ybor", en la que acompañabas con la guitarra a la
cantante Dinorah Rivas y también actuabas. ¿Es la actuación otra faceta tuya
como artista?
Sí, te recuerdo en la obra que trabajamos juntos. Acompañé a nuestra
Dinorah Rivas con la guitarra y tuve mis partes como un personaje importante,
donde ella y yo dialogábamos sobre la historia de Ybor City. Te diré que he
estudiado muy poco de actuación y lo hice –aparte de añadir una experiencia más–
con el propósito de estudiar y conocer mejor cómo
proyectar la voz.
¿Algún modelo a seguir en el
aspecto artístico?
Empiezas imitando a una figura consagrada, que te guste, y después debes
encontrarte a ti mismo, que es la parte mas difícil, pues tiene muchos
requisitos: el conocimiento, la voluntad, la determinación, la perseverancia y
la disciplina. Al final, como resultado, debes gustarle al público.
¿Cuál es la experiencia como
artista que te ha marcado?
Continúo adquiriendo experiencia en cada actuación, pero sin duda es
inolvidable la primera vez que compartes tarima con figuras extremadamente
famosas y tienes frente a ti una audiencia de cientos y cientos de personas y
te ganas el aplauso. Nunca olvido cuando escuché los aplausos a una canción de
mi autoría.
¿Tu mayor triunfo y mayor
decepción?
Triunfar es conquistar al público y tratar de complacerlo, tanto ejecutando
una composición original o un tema ajeno. Ese el mayor reto, el mayor triunfo. No agradar a la audiencia es, sin lugar a dudas, la mayor decepción.
¿Tus grandes pasiones?
Amo la música, la escogí como profesión. Generalmente, me encanta tocar la
guitarra. Por otra parte, amo la sabiduría, siempre me ha gustado prepararme lo
más que pueda cada día.
¿Planes?
Mis planes son infinitos y siempre mi primer objetivo es superarme
diariamente, mediante la dedicación y el estudio. Estoy grabando un nuevo CD y hay
dos más en proyecto.
¿Sueños, anhelos?
Me gustaría ver y escuchar más sobre la historia de la música que hizo
bailar al mundo entero desde el principio del siglo XX.