Por Leonardo Venta
Xiomara Alfaro, la famosa cantante cubana que honró su carrera con éxitos como “Luna Rosa”, “Siboney”, “Moliendo Café” y “Serenata Mulata”, entre muchos otros, se presentará este domingo, 3 de junio en la Sala Ferguson del Tampa Bay Performing Arts Center. El programa, una cita con la nostalgia, dará comienzo a las 3 de la tarde.
Con motivo de este histórico concierto, la hemos entrevistado vía telefónica desde su hogar en la ciudad de Atlanta.
¿Cómo comenzó su carrera?
Nunca pensé ser artista, quería ser enfermera… hacer tantas cosas, pero Dios quiso darme la voz para ganarme el pan de cada día. Conocí a un muchacho que era bailarín, Alexandre. Él me escuchaba cantar en mi casa y siempre me decía que yo debía dedicarme al canto. En una oportunidad, Alexandre me pidió que le acompañara al Teatro Martí a un ensayo de una revista musical llamada “Batamú". El maestro Obdulio Morales, director y compositor de la revista, me pidió que cantara una canción, y yo interpreté “Siboney” de Ernesto Lecuona. Le gustó mi interpretación y me contrató. Ese fue el inicio de mi carrera.
Más tarde trabajé en la revista “Bondelle” en el Sans Souci. Después que vendieron el Sans Souci se mudó la revista para El Tropicana. Cuando me dieron el contrato nunca me incluyeron de solista, me daban trabajo con el coro. Sin embargo, a todo el mundo le llamaba la atención mi voz.
No obstante, más adelante, me contrató Katherine Dunham, una bailarina negra muy famosa que creó un centro muy influyente de danza afro-americana que vino a La Habana buscando talentos para integrar su compañía. Me escuchó cantar y me contrató para irme de gira con ella por Europa a países como España, Portugal, Bélgica, Francia y Grecia.
¿Qué sucedió cuando terminó su contrato con la compañía de Dunham?
Xiomara Alfaro. – Regresé a La Habana y comencé a trabajar como solista en El Tropicana. De allí, me ofrecieron contratos en Italia, Centroamérica y Suramérica.
¿Dónde y cuándo grabó usted su primer disco?
Lo grabé en Lima, Perú, en 1955.
¿Hubieron más grabaciones?
En una actuación mía en el teatro Campoamor, de La Habana, me vio la RCA Víctor, que me ofreció un contrato. Así hice tres discos de larga duración con ellos. Después continué mi gira por Suramérica.
¿Algo especial sobre su gira por el Cono Sur?
En Venezuela grabé mi número “Moliendo Café” que se convirtió en éxito entre los suramericanos de la época.
¿Cuál fue su relación con Celia Cruz y Olga Guillot?
Bien, ellas me decían que yo no debía haber nacido artista, sino monja, porque no era de hablar mucho.
¿Dónde reside usted?
Vivo en las afueras de Atlanta por 10 años con mi esposo el pianista y compositor Rafael Benítez, al que conocí en Nueva York. Con él he compartido 46 años de mi vida.
¿Tiene usted hijos?
No tengo, me hubiera gustado tenerlos.
¿Cuál considera su mayor triunfo como artista?
El que Dios me haya permitido que todos los cubanos me conozcan.
¿Qué significa Cuba para usted?
Conozco 36 países, pero mi tierra es la más bella del mundo. Cuando muera, quiero que me incineren y rieguen mis cenizas alrededor del mar de Cuba. Mi isla y los Estados Unidos son mis grandes amores. Este país me ha dado abrigo. Hay que pensar en todas las cosas buenas que nos ha proporcionado a los cubanos.
A Celia Cruz no le gustaba hablar sobre su edad, ¿dice usted la suya?
A algunos se la digo, y a otros no. Todo depende de quién me la pregunte.
¿Qué significa para Xiomara Alfaro el exilio?
Has tocado con el dedo la llaga. Todos los días en oración le pido a Dios que se arregle Cuba para irme a vivir allá.
¿Unas palabras finales para nuestros lectores?
La humildad es lo más bello que Dios ha creado en una persona.
Breve síntesis biográfica de Xiomara Alfaro
Xiomara Alfaro es una cantante cubana, soprano de coloratura, que debutó en 1951, en la revista musical "Batamú", presentada en el teatro habanero Martí por su autor, el compositor y director Obdulio Morales. Trabajó en los principales centros nocturnos de La Habana, como El Tropicana, El Montmartre y el Sans Souci donde cantó en la revista musical “Bondelle” con la que viajó como parte del elenco a Las Vegas. A su regreso fue contratada por Katherine Dunham para su ballet afro-norteamericano. Con esta agrupación realizó una gira por diferentes países de Europa.
Se presentó en programas de radio, televisión y teatrales. Visitó numerosos países. Participó en el filme "Mambo" con Silvana Mangano y Vittorio Gassman. Ha grabado gran número de discos con canciones cubanas y de otros países, muchos de ellos, con su esposo como director y arreglista. Actualmente reside en Atlanta.